22 de julio de 2017
La Vicerrectora de la Universidad invitó a los estudiantes a ser parte de IYF.
El 21 de julio de 2017 se realizó la Expo Cultura de IYF en las instalaciones de la Universidad Técnica del Norte (UTN) ubicada la ciudad de Ibarra, a dos horas de Quito. Los preparativos comenzaron con un mes de anticipación. Los jóvenes dando su tiempo y recursos organizaron cada stand.
Algunos stand como los de Haití y Brasil recibieron ayuda de parte de las Embajadas de esos países, donde dos de sus líderes fueron voluntarias al exterior. Los stands fueron basados en la cultura de Brasil, Corea del Sur, Estados Unidos, Haití, Islas Fiji, India y Jamaica. El objetivo fue mostrar sus tradiciones, gastronomía, oportunidades de estudio y sobre todo el trabajo que IYF realiza en estos países.
El día viernes, muy temprano, todos los jóvenes se reunieron en la sede de IYF en Quito para trasladarse a la ciudad de Ibarra, sin embargo a pocos minutos de salir, un responsable de la Universidad se comunicó para informarles que el transporte que los llevaría hasta Ibarra tuvo un desperfecto mecánico y no llegaría. A pesar de ello, el ánimo de los jóvenes no decayo. La directiva de IYF gestionó rápidamente un nuevo transporte y juntos viajaron hacia la Universidad.
Al llegar a Ibarra se montaron los stands y los jóvenes danzarines rápidamente se cambiaron para empezar el evento. El Director de Relaciones Públicas de IYF dio las palabras de bienvenida a los alumnos de la Universidad Técnica del Norte, y los invitó a ser parte del voluntariado que ofrece IYF tanto en el Ecuador como en el extranjero.
La Banda Ebenezer de IYF interpretó dos canciones que animaron el ambiente estudiantil y la alegría de IYF se contagiaba rápidamente en los participantes. Las danzas de África, “Tumaini”, abrió el evento cultural, “las sonrisas brillantes de los jóvenes demostraron la felicidad” que IYF deposita en cada miembro. La última danza de la India, Tattad, impresionó a los asistentes por la fuerza y alegría de este ritmo.
Mishell Madera una ex voluntaria en Haití compartió su experiencia de voluntariado y habló sobre la diferencia que hubo en su mentalidad cuando pudo vivir durante un año para otra persona. Al final de su voluntariado, ella pudo recibir más amor del que pudo entregar. Esta historia despertó en los jóvenes universitarios un gran interés por el voluntariado y poco a poco iban animándose para trabajar junto con IYF.
Antes de comenzar las exposiciones en cada stand, la doctora Teresa Sánchez, dirigió un mensaje a los estudiantes sobre la oportunidad que tienen de involucrarse en organizaciones como IYF, que motivan un cambio en la mentalidad y les ofrecen la oportunidad de desafiarse, al viajar a otros países como representantes del conocimiento y talento ecuatoriano. La vicerrectora agradeció a IYF por haber ido a la Universidad y felicitó por el trabajo que realiza en pro de la juventud ecuatoriana.
Para cuando iniciaron las exposiciones en los diferentes stands, la felicidad en el rostro de los presentadores se transmitió a los estudiantes universitarios, quienes disfrutaron de las presentaciones de cada país y se escribieron como voluntarios en el stand de IYF.
El canal de televisión de la UTN realizó varias entrevistas a jóvenes de IYF quienes demostraron que el desafío, cambio y unión no solamente es un lema sino una forma de vida en cada uno de sus corazones.
Aquel mismo día, rectores de varias universidades del país estaban reunidos en la UTN para debatir sobre las mejoras académicas que debían hacerse a nivel nacional, pero al escuchar la alegría de los jóvenes que participaban de la Expo Cultura no dudaron en participar. Allí fueron testigos de la labor de IYF. El director de Relaciones Públicas de IYF, David Cartuche se reunió con ellos y conversó más detalladamente sobre el trabajo que hace IYF alrededor del mundo y quedó una puerta abierta para que cada universidad del país se vincule con IYF.
Al culminar el evento los jóvenes se sentían satisfechos por el trabajo realizado, fortaleciendo sus corazones por poder sobrepasar las dificultades; y aunque estaban cansados, regresaron con grandes expectativas a la ciudad de Quito, a la espera de próximos eventos culturales en otras universidades.
